
Si no estás muy familiarizado con la discapacidad visual y sus necesidades, es probable que pienses que el sistema braille es la forma que tienen de leer todas las personas ciegas.
Imagina que gestionas un museo y que tienes que hacer que sus contenidos sean inclusivos para todas las personas, también para personas con discapacidad visual. Casi con total seguridad estarás pensando en hacer paneles o algún libro con información sobre la exposición en braille. Está bien, es buena opción, pero desde luego no es la única y no es la solución para todas las personas con discapacidad visual y te explico porqué.
No todas las personas ciegas leen braille.
Ten en cuenta que muchas personas ciegas no nacieron así sino que su ceguera fue sobrevenida. Así pues, aunque a veces aprenden a leer braille, no siempre lo hacen y en muchas ocasiones no tienen la destreza suficiente como para leer textos muy largos en braille.
Sí que aprenden, por ejemplo, a identificar números, de modo que puedan diferenciarlos en un ascensor o a leer breves textos como para identificar el nombre del medicamento que están tomando.
Supón que tú tienes que empezar a leer en cirílico de hoy para mañana. No nococes los caracteres ni la gramática, por lo que con total seguridad, te va a llevar un tiempo leer con destreza y más aún si tienes que leer textos largos.
Eso no quiere decir que no haya que utilizar el braille ni mucho menos. Por supuesto que es útil para muchas personas que lo utilizan a diario, especialmente para las personas sordociegas, para quienes el tacto es la única forma de recibir información y el braille les permite hacerlo de forma autónoma.
Pero no debes dar por hecho que un panel o un texto en braille es suficiente para que la exposición de tu museo sea considerada accesible para las personas con discapacidad visual. Es un paso importante pero no el único que deberás dar.
El braille no es un idioma
Otra de las realidades que suele sorprender es que el braille no es un idioma. La gente me suele preguntar si un texto en braille sirve igual para un inglés, un francés y un español.
La respuesta es no.
El braille es un sistema en el que se representan las letras y signos a través de una serie de puntos, es decir, una especie de alfabeto con el que se construyen las palabras en diferentes idiomas. Digamos que es el alfabeto pero hecho de forma táctil.
Así pues, volviendo al ejemplo del museo, podrás incluir información en braille, pero debes saber que tendrás que elegir el idioma en el que lo quieres poner.
Cuidado con la colocación
Otro aspecto realmente importante es la colocación de los paneles, especialmente si tienen mucha información en braille.
Es preferible que los paneles estén ligeramente inclinados para facilitar la lectura.
Hay diferentes soportes para la colocación de paneles o carteles
• En base o banderola.
• Colgantes.
• Sobre planos horizontales o inclinados.
Si lo que hay que leer es algo muy corto no hay problema porque esté colocado sobre la pared, pero si el texto es largo la lectura es más compleja, así que conviene que esté colocado sobre un plano inclinado
Ojo y cuidado con la orientación del texto a la hora de colocación. Visualmente y si no tienes conocimiento de braille es probable que no sepas si está boca arriba o boca abajo. De hecho no sería la primera vez que se colocan paneles en braille del revés. Es importante que quien vaya a hacer y colocar los paneles o carteles en braille, tenga conocimiento sobre el tema y los ponga con la orientación correcta.
La altura de colocación
En cuanto a la altura de colocación, esto también es importante porque a veces nos encontramos cartelería en zonas muy altas, que no son alcanzables.
Los rótulos informativos o direccionales deberán estar dentro de la zona de interacción del brazo, entre 125 y 175 cm de altura respecto al suelo. También pueden colocarse entre 90 y 125 cm medidos desde el suelo. Fuera de estas dimensiones no se recomienda colocar información en relieve y/o braille poque es bastante difícil de leer e incluso en ocasiones es imposible.
¿Qué te han parecido estos secretos sobre el braille que te acabo de contar? ¿Los conocías ya o te han sorprendido? ¿Crees que este post le puede ayudar a alguien más?
Si es así no lo dudes y compártelo. ¡Ah! y déjame tu comentario para conocer tu impresión, te estaré muy agradecida.
Por si quieres seguir aprendiendo…
Al margen de estas 4 claves que te acabo de dar, hay otros muchos aspecto a tener en cuenta a la hora de señalizar un lugar e incluir información de forma que sea accesible para personas con discapacidad visual. Aspectos como la tipografía, el tamaño de la letra o el contraste cromático, son muy importantes para que el contenido sea accesible para personas con baja visión. Ten en cuenta que no todas las personas con discapacidad visual son ciegas y hay quienes tienen otras necesidades de visión.
Esto ya lo dejamos para otro post pero, si quieres aprender más sobre señalización inclusiva, te dejo aquí enlace a un video curso que seguro te puede interesar.